El G222E es un detector de gas compacto y versátil diseñado para monitorear uno o dos gases específicos. Puede equiparse con uno o dos sensores electroquímicos, lo que permite una detección confiable de una variedad de gases tóxicos, oxígeno o hidrógeno en diferentes rangos de medición. El dispositivo está aprobado para su uso en entornos peligrosos (zona Ex) y ofrece un diseño duradero, práctico y liviano para una seguridad y comodidad óptimas.

Los valores medidos, los tipos de gas, el rango de medición y el estado de carga de la batería se pueden leer en cualquier momento cómodamente en la pantalla. El dispositivo funciona con una sola batería alcalina, lo que proporciona hasta tres meses de funcionamiento continuo. En caso de una concentración de gas peligrosa, el G222E alertará al usuario mediante alarmas visuales, acústicas y de vibración, lo que garantiza una respuesta rápida ante situaciones peligrosas.

El G222E es particularmente adecuado para aplicaciones donde se anticipa la presencia de un gas específico. Si es necesario controlar el monóxido de carbono, el amoníaco, el sulfuro de hidrógeno o el hidrógeno, un detector de un solo gas es una solución rentable. El G222E ofrece una ranura adicional para un segundo sensor electroquímico para monitorear la concentración de oxígeno además de un gas tóxico o hidrógeno. Permite flexibilidad en la configuración del sensor, permitiendo el monitoreo de diferentes gases tóxicos o usando dos sensores para el mismo gas pero en diferentes rangos de medición, según los requisitos específicos de la aplicación.

En el diseño de la serie Micro 5 se priorizó la seguridad y la comodidad de uso, para garantizar su idoneidad para entornos peligrosos ATEX y aplicaciones mineras. La carcasa de plástico recubierto de goma proporciona durabilidad y protección contra la entrada de polvo y agua (IP54, próximamente IP68). A pesar de su tamaño pequeño y peso ligero (máximo 4 onzas), el dispositivo ofrece un rendimiento confiable y puede usarse cómodamente incluso en espacios reducidos. Las alarmas visuales y acústicas, junto con las alertas por vibración, garantizan que ninguna alarma pase desapercibida, incluso en entornos ruidosos o zonas con poca visibilidad.

El G222E cuenta con uno o dos sensores EC según los requisitos del usuario, lo que permite el monitoreo selectivo de uno o dos gases tóxicos, hidrógeno u oxígeno. Los sensores son duraderos y confiables, y se incluye una tapa de calibración para la prueba funcional diaria con gas de prueba. Se puede acceder al registrador de datos interno mediante la tapa de calibración inteligente y el software de configuración conectado a una PC mediante un cable USB. La calibración y el ajuste del G222E se pueden realizar utilizando una estación de acoplamiento DS400 o DS404.

La pantalla LC del dispositivo muestra las concentraciones de gas medidas, los tipos de gas y las unidades. El estado de la batería también es visible en cualquier momento. La pantalla se puede girar 180 grados para facilitar la lectura cuando el dispositivo está conectado a la ropa de trabajo mediante la pinza de cocodrilo. El G222E funciona con una sola batería, lo que proporciona suficiente energía para nueve meses de uso (basado en jornadas laborales de 10 horas) o 90 días de funcionamiento continuo. La batería se puede reemplazar rápidamente, lo que garantiza un tiempo de inactividad mínimo y permite que el detector de gas esté listo para su uso en menos de un minuto.

En general, el G222E ofrece una solución confiable y versátil para monitorear gases específicos en diversas aplicaciones. Su tamaño compacto, construcción duradera y características fáciles de usar lo convierten en una excelente opción para las necesidades de seguridad personal y detección de gases.